¿Qué singularidad encierra mi cuerpo? ¿Qué misterio esconde mi alma? Creo que cada mortal se encuentra en esta vida para desarrollar una misión, que si bien tenemos que buscarla y encontrarla, ya nos ha sido impuesta desde ese lugar que nadie aún conoce. Siempre he sentido la necesidad de conocer algo más, de al menos interiorizar mi propia existencia, como un camino hacia algo, inimaginable por su desconocido misterio, pero real como la vida misma. Quizás tengamos que escuchar muchas veces el silencio entre la penumbra de nuestros momentos, para discernir ese proposito que la vida nos tiene reservado, por tanto creo que el destino se va creando, conforme nuestros pasos se encaminan hacía esa busqueda de nuestra misión. Mientras tanto sostengamos la dulzura de nuestra vida entre AMOR, SINCERIDAD Y ENTREGA, demos más que podamos recibir y ante todo dialoguemos con nuestro silencio, el sabe mucho de nosotros, tanto como la arena del mar sabe de las mareas y los naúfragos. No penséis que estas palabras son una reflexión que carece de argumentos, estas palabras es la verdad de nuestra propia existencia.
"Dijo el silencio que el tiempo es eterno,
a bien sabemos de ello,
que nadie muere sin conocerlo
entre la luz que siempre llega del cielo"
Miguel Ángel Bernao
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