viernes, 14 de septiembre de 2012

Desconozco

Desconozco el paradigma de mi existencia, 
ni tan siquiera, el protocolo preciso y justo,
para amarme como una existencia magnífica
e impenetrable, una exaltación excesiva y bella
que suplica sometimiento y comprensión plausible
al clero capitular de esta agonizante existencia.

Desconozco la persuasión del silencio calmado
la adecuación de mis emociones en los vacíos
y los remansos donde el alma descansa tranquila.

Desconozco el tiempo, que va transitando sin rumbo,
las oquedades del envejecido recuerdo perseverante
y tal vez la distinguida conciencia de mi existencia.

Desconozco conocerme, en las cautivas pesadillas
que declama mi subconsciente entre madrugadas
y noches desconsoladas de aguaceros infernales.

Desconozco la razón que me lleva a llorar por mi,
pero este abatimiento es suficiente para claudicar
en los deseos irrefutables del sumiso inconsciente.

Desconozco si tu sientes lo mismo que yo…

2 comentarios:

  1. a veces toca combatirnos ... fascinada por tu poesía.

    ResponderEliminar
  2. Muchas veces amiga Anabel, pero el espíritu siempre sobrevive al combate interior. Gracias por tus comentarios. Un fuerte abrazo amiga.

    ResponderEliminar