La voz está amando

Va creciendo, según me alzó al horizonte,
la renovada necesidad de una visión sabia
que dance con los pensamientos marchitos,
en la paz de los ocasos dónde nos amamos.

No hubo privilegio de espera para el tiempo
ni venia declarada en las prendidas ilusiones,
y aún parece que tu esencia se engrandece
en el recuerdo envejecido de mis pasiones.

Y a la par que por venturosos y livianos,
los sentimientos son materia comprimida,
de esplendor se va recortando las huellas,
en los pliegues y remangos de tus encantos.

La voz está amando ante el cielo plomizo
clemencia pidiendo al trueno encastado,
que no transborde el murmullo empapado
al olvido mustio de nuestro fértil hechizo.

Amo andanzas, afrentas y batallas;
siendo hombre de idílicos caminos,
sin pesadumbres que expriman el alma
en amaestrados y falsos sentimientos.

Postulo ser otoño en la rutina de tu esencia,
para guarecer tú desnudo en mi ternura
despojando al universo las suaves formas,
que protegen el amor en tu presencia.